Y en ese día se separarán dos monstruos, una hembra llamada Leviatán, que morará en el abismo sobre donde manan las aguas, y un macho llamado Behemot, y ocupará con sus pechos un desierto inmenso llamado Dandain.

miércoles, 21 de abril de 2010

en el interior

un grito desahoga
una lagrima tambien
un dolor que nace
y q nadie lo puede  ver

una vida que se escapa
una alegria que termina
una amistad q c pierde
q solo en lagrimas termina

un adios con dolor
un hola sin rencor
una mirada d desepcion
una amor q c esfumo

1 comentario:

  1. Un adiós, una descepción y un amor... ojalá no dejaran esa huella en el interior, más cuando las lágrimas ya ni vienen a tratar de borrar el dolor que nadie puede ver.

    ResponderEliminar